Dinamismo preventivo en la actuación policial: caso Othón P. Blanco, Quintana Roo.

Abstract

La importancia de esta investigación estriba en acreditar fehacientemente, que la prevención primaria del delito, a través de la operatividad policial basada en la proximidad social es la estrategia adecuada para inhibir los hechos delictivitos y garantizar la armonía social son menoscabo del fortalecimiento del tejido social y la determinación de las condiciones necesarias y adecuadas para el desarrollo humano. Lo anterior, debe considerarse como la estructura que sustenta la atención a la criminalidad y la debida resolución a los problemas de la sociedad en un ambiente adecuado de paz, confianza y credibilidad respecto a la acción y actividad policial. De tal suerte, que la policía debe de orientar sus estrategias hacia un paradigma que genere una sinergia convencional con la ciudadanía para garantizar fehacientemente la seguridad y el orden público. Es prioritario argumentar que el manual de Actuación Policial (2009) establece que la Policía de proximidad debe identificarse como “una policía debidamente capacitada para mantener contacto con la ciudadanía, a través de estrategias de penetración social y recopilación de información específica por medio de patrullajes y programas permanentes de vinculación”. En esta tesitura, debe comprenderse que el establecimiento de la policía de proximidad social nace de la extrema necesidad de mantener una relación estrecha con la ciudadanía en las acciones de prevención del delito que permitan garantizar los entornos libres de actuaciones delincuenciales y de violencia que afectan gradualmente la cotidianidad, es decir, que “Una de las principales obligaciones a las que se enfrenta el policía de proximidad social es el posicionar y dignificar la imagen de la policía, en la familia, en el sector educativo y en la sociedad en general” (Comisión Nacional de Seguridad, 2018).